Por: Nohelia Pasapera

Los autos han tomado nuestras calles. Esto es paradójico porque las ciudades son lugares donde viven las personas, es decir, uno debería de estar acostumbrado a vivir en ciudades humanas. Aquí pasa todo lo contrario. 

Sin embargo, no todas son malas noticias. Santiago de Chile nos demuestra que las personas podemos recuperar espacios, ¡sí es posible! Gracias a la audacia y persistencia de los colectivos de activistas que promueven el uso de la bici, Santiago es una ciudad más amigable. La energía humana de cada activista puede cambiar el rumbo de una ciudad y un país. Eso lo saben cada uno de los asistentes a la Masa Crítica de Santiago*, quienes desde hace más de dos décadas vienen recuperando espacios y calles. Para ello, lo único que necesitan es la energía que generan con el pedaleo y sus bicicletas.

Algunos activistas de Cicloaxion estuvimos en la Masa Crítica de noviembre. Hemos regresado contentos, inspirados y con muchas ideas nuevas. Nuestra intervención fortaleció lazos con nuestros pares activistas de Santiago: Vive la bici, Furiosos Ciclistas, Arriba é la chancha, Macleta, entre otros colectivos. Grupos de personas con los que compartimos experiencias, historias y nuestro sueño por ciudades más humanas.

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